El Valle de los Caballos - Jean M. Auel

Hace un tiempo que os hablé de la saga literaria "Los Hijos de la Tierra", una obra creada por la estadounidense Jean M. Auel.
En concreto, de su primer volumen "El Clan del Oso Cavernario", que en opinión de un servidor resulta un imprescindible del género en la novela histórica y una obra maestra de la literatura universal, y que no puedo por más que recomendar fervientemente a que descubráis dicho libro.
De la pluma de la autora y un par de años más tarde, en un ya lejano 1982, llegaría la continuación directa titulada: "El Valle de los Caballos"

"Los Hijos de la Tierra" es la saga que los engloba y hasta la fecha se compone de seis volúmenes de los que por una desgracia relativa, ninguno de ellos se acerca a la maestría del primero.
Si bien es cierto que esta entrega no alcanza esas cotas, no por ello deja de ser una gran lectura y una estupenda continuación de las aventuras de Ayla, la protagonista absoluta de la serie.

Esta secuela retoma la historia justo donde acabó su predecesor (no desvelaré nada u os avisaré en su defecto) y la continua de forma directa añadiendo nuevos personajes y situaciones.
En esta ocasión la escritora utiliza dos tramas paralelas para el desarrollo de la novela alternando un capitulo para cada una hasta acabar confluyendo ambas en el tramo intermedio y final de la obra.
Por un lado se nos narra el desarrollo espiritual y superviviente que acontece a la protagonista, la cual y tras una serie de eventos acaba por vivir en solitario en el valle que da nombre al libro y por otro el viaje que emprenden dos hermanos a través de la vasta región de la prehistórica Europa.

"El Valle de los Caballos" se publicó tan sólo dos años después de su primera entrega, un periodo quizás demasiado escaso dada la intrincada complejidad que supone la recreación de una época como en la que se ambienta y construir y continuar la homérica historia de "Ayla", la protagonista.
Quizás por ello, o simplemente porque "El Clan del Oso Cavernario" es sencillamente irrepetible, en esta segunda entrega se evidencia un reseñable bajón en intensidad, calidad y emoción.
"A priori", es posible que alguien crea que de mis palabras se desprenda una crítica mediocre hacía esta secuela, nada más desacertado.
"El Valle de los Caballos" es una obra de muchísima calidad y digna de admirar, pero desgraciadamente para ella y el resto de la obra, su primera entrega siempre eclipsará el legado de la autora.

Los dos grandes logros conseguidos por parte de la autora para con esta saga siguen siendo su sello de identidad y se encuentran presentes.
El primero de ellos, y en el que más se nota el ingente empeño que la estadounidense intenta imprimir en sus libros, es la meticulosa recreación del marco histórico prehistórico.
Una prehistoria que se antoja plausible y verídica, a veces casi tangible, gracias a la imponente labor de documentación de Auel.  
Rituales, costumbres, metodología... y un largo etcétera que sirven a su creadora para embarcar al lector en un viaje único en la literatura.
Pero de poco serviría esta gran meticulosidad si no está acompañada de un hilo conductor que nos haga disfrutar de todos y cada uno de los parajes y descripciones, es decir de una buena historia.
Y es ahí donde entra el plato fuerte que la autora cocina con gran habilidad para nuestro paladar.
La soberbia crónica de la primera entrega es continuada inmediatamente donde concluyó, y en esta ocasión nuestra protagonista deberá encarar todos los contratiempos necesarios para sobrevivir y salir adelante de entre miserias y penurias.

Por desgracia no todo iba a ser perfecto, y hemos de adentrarnos en el capítulo de "peros" y máculas.
La autora de la saga: Jean M. Auel
En primer lugar, y eso es algo que se hará evidente para cualquier persona que haya avanzado a través de los diversos tomos de la de la serie, la magia que poseía el original es inigualable, y no sólo se ve mermada en esta entrega sino a lo largo de toda la saga posterior.
¿Es eso algo malo?
En absoluto, la historia sigue siendo enteramente disfrutable, emocional... y  conserva retazos de ese encantamiento anterior, pero no es menos cierto que el relato se encuentra en ocasiones resentido y un tanto forzado en el desarrollo de las situaciones que acontecen.
Para esta ocasión, el libro alterna capítulos puramente descriptivos (una imposición en el desarrollo por cómo se halla la trama planteada) con otra línea paralela donde abunda el recurso del diálogo que sirven para aliviar la "carga" del lector y dotar de mayor dinamismo al conjunto.
El problema de esto, aparte de la evidente "fatiga" que el leyente menos acostumbrado a largos pasajes puramente descriptivos pueda experimentar, es la sensación de reiteración que en ocasiones resulta demasiada acusada, si bien hacía las tres cuartas partes del libro se retoma una prosa más dinámica, Auel carece de una habilidad que debería estar más depurada para construir dichos pasajes y que no resultasen en ocasiones tan reiterativos o carentes del elemento sorpresa que también se echa en falta en su progreso, pues nos será fácil vaticinar el desenlace y tramo final del libro.

Por otro lado, y como era de esperar, se introducen nuevos personajes, con mayor o menor acierto, bien construidos y sólidos, pero carentes la mayoría de ellos del carisma que encontrábamos en el predecesor, y es que las comparaciones en este caso son inevitables.
El desarrollo del personaje central continúa in crescendo y es uno de los puntos más interesantes y notables de la novela.
Asistir a su desarrollo y complejidad de manera tan bien encarada por parte de la autora redunda de una manera muy positiva y resulta ser una de sus mejores virtudes.

"El Valle de los Caballos" sigue siendo una demostración de fuerza por parte de su creadora en la celebérrima saga "Hijos de la Tierra". Continua una historia soberbia de una manera impecable y supone un nuevo capítulo con el que disfrutar de la épica de la aventura prehistórica.
En su haber posee más virtudes que defectos y se antoja como una lectura de envidiable calidad, pero como principal hándicap en su contra se topa con ser la hermana pequeña de un adelantado de su época.
"El Clan del Oso Cavernario" sigue siendo sin lugar a dudas (y será) el mejor libro de la autora, y eso opaca al resto de la saga que sin desmerecer el resto en calidad tampoco se encuentran al mismo nivel y es algo que se torna evidente conforme uno consume los diversos tomos que componen la serie.    
Es por eso que muchos podrán sentirse un tanto decepcionados al no encontrar esa magia que desbordaba esa primera entrega por todas sus páginas.
A pesar de ello, esta novela resulta muy disfrutable y recomendable para aquellos que quieran continuar con las aventuras de la protagonista y disfrutar de una literatura de calidad en un marco histórico único e incomparable.
Recomendada.

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